Más de 700 personas reflexionaron con la similitud de la estrategia de riesgos en la Reunión Ampliada de Seguridad y Salud Ocupacional de julio.

La implosión del submarino turístico Titán y las lecciones que dejó el accidente fueron analizadas en la Reunión Ampliada de Seguridad y Salud Ocupacional (RASSO) de julio, en la que participaron más de 700 personas, tanto de manera presencial como por streaming Teams.

El gerente de Mantenimiento Mina, Pablo Gálvez, expuso antecedentes relacionados con esta tragedia y resaltó la importancia de contar con una estrategia de gestión de riesgos, conocerla, seguirla y aplicarla de forma disciplinada, porque ello proporciona ambientes seguros de trabajo.

En el accidente murieron cinco personas cuando el Titán descendía a las profundidades del océano Atlántico para que el pequeño grupo de turistas pudiera observar de cerca los restos del Titanic. La implosión habría ocurrido cuando una parte de la estructura del submarino, elaborada en fibra de carbono, se agrietó por las altas presiones, haciendo colapsar al batiscafo. Expertos han planteado que el reemplazo de acero y titanio por fibra de carbono sería la principal causa de la tragedia.

“Independiente de la industria, los controles se erosionan y hay que verificar constantemente. Es mejor posicionarse en que no estamos tan bien y que podemos mejorar, que creer que tenemos todo bien y resuelto. Desafiar nuestros propios procesos, antes que los eventos ocurran es la real prevención que Centinela espera. Por eso debemos aprender de los errores, esa es la estrategia y si nosotros lo hacemos con disciplina, podremos desarrollar un trabajo con riesgos controlados”, afirmó Pablo Gálvez.

Reconocimientos

Como es tradicional, en la RASSO se entregaron reconocimientos a personas, áreas y empresas colaboradores que han destacado en la gestión de riesgos de seguridad.

La empresa Tepsac fue destacada por su buena práctica al implementar un sistema de brazo ingrávido que elimina la exposición de los trabajadores, permitiendo disminuir los eventos con lesión en las manos al realizar tareas de retiro, armado y montaje de neumáticos en equipos mineros.

También se premió el ‘Yo digo No’ de Patricio Quezada, supervisor de Komatsu, quien evidenció la falta de una barrera dura en una plataforma, lo que podría ocasionar una caída de distinto nivel en las tareas de reparación de un cargador.

Mientras que Adolfo Vergara, ingeniero Aseo Industrial y Topografía, de la gerencia Servicios de Soporte a la Operación, y Miguel Roa, ingeniero senior Mantenimiento Muelle SIAM, fueron reconocidos por el compromiso y la dedicación que ejercen a diario en la gestión de sus respectivos contratos.