A pocas semanas de su lanzamiento, ya se visualiza un aumento del 43% por parte de los trabajadores y un 56% en los supervisores.

Un positivo balance realizó la gerencia de Seguridad y Salud Ocupacional (SSO) por la campaña “Yo digo NO”, cuyos resultados van al alza reportándose 361 alertas en esta materia durante el primer trimestre del 2022.

Este hito alcanzado en marzo, coincide con el lanzamiento de las Tarjetas por la Vida, que vienen a reforzar esta campaña, para potenciar y fomentar el empoderamiento de los trabajadores frente a situaciones o riesgos no controlados en sus tareas.

“Estamos muy contentos porque la gente se está adhiriendo y tenemos una muy buena reportabilidad. La idea es seguir avanzando con fuerza para evitar que los accidentes de alto potencial se gatillen en terreno. Por lo tanto, con estas tarjetas vamos a complementar la campaña e invitamos a todos y todas a que tengan la confianza en terreno de poder levantar la tarjeta cuando los riesgos no estén controlados”, detalló Claudio Miranda jefe de Reportabilidad y Mejoramiento de la GSSO.

Respecto al balance expuesto, la gerencia de Desarrollo Mina lidera el ranking con 155 reportes, mientras que por las empresas colaboradoras destacan Thiess y Tepsac con 85 y 50 usos del “Yo digo NO” respectivamente. Esto se traduce en que, durante el primer trimestre, se evitó la ocurrencia de eventos no deseados que pudieron haber afectado a las personas.

«Esta campaña es una buena iniciativa porque nos hace trabajar de forma segura a todos, teniendo el respaldo de poder levantar la mano o la alerta cuando las condiciones en nuestras labores no sean óptimas», valoró Juana Maluenda, técnico mecánico de la empresa Thiess.

Mientras que el supervisor de Mantención de la misma empresa, Marcelo Zamorano, agregó que “tenemos que pensar que el empoderamiento de nuestra gente pasa por ‘decir que no’ sin miedo a ningún tipo de represalia, todo lo contrario, hacer más seguro el trabajo que se realiza y poder ayudarnos a mejorar nuestros procesos”.

La invitación es continuar trabajando para alcanzar una cultura preventiva, utilizando estas herramientas, especialmente con las Tarjetas por la Vida, que son un complemento a la campaña “Yo Digo No”, pero recordando que sin ellas también se puede detener una tarea.