Gracias a los avances en el Plan Paso a Paso estos recintos retomaron su funcionamiento con medidas especiales para resguardar la salud de las personas.

Celebrar un ascenso, despedir a un colega que emprende nuevos rumbos o simplemente disfrutar de un ‘happy hour’ después de la jornada laboral, son algunas de las opciones que tienen las trabajadoras y trabajadores de Minera Centinela en los pubs de los campamentos Chañar y Algarrobo, recintos que nuevamente abrieron sus puertas tras dos años de estar cerrados por la pandemia de COVID-19.

“Estamos muy felices porque estamos abriendo el área de recreación y esparcimiento de Servicios a las Personas. Esto se enmarca en el plan Paso a Paso, entendiendo que del punto de vista del COVID-19 ya hay una apertura hacia este tipo de espacios”, explicó el supervisor de Campamento, Michael Suarez.

Para el buen funcionamiento de ambos recintos se establecieron una serie de medidas que apuntan a resguardar la salud y seguridad de las personas, como aforos, sistema de reservas, medidas de higiene, puntos limpios y tiempo de permanencia, entre otras.

Alejandro Vega, planificador senior de la gerencia de Servicios de Soporte a la Operación, asistió junto a sus compañeros al pub Chañar para compartir un momento tras finalizar su jornada: “Es súper agradable tener estos espacios. Yo creo que nos hacía falta después de tantas restricciones. Creo que es importante para compartir, conversar, tomarnos una bebida o incluso comernos un completo, porque es muy raro comer esto en una faena”.

Mientras que Rocío Uribe, líder de Proyectos, quien también visitó el pub Chañar en su reapertura, sostuvo que “es súper bueno, sobre todo para la salud de todos los trabajadores y trabajadoras de Centinela, porque creo que son importantes los momentos de recreación que podamos tener dentro de los turnos”.

Los pubs Chañar y Algarrobo están abiertos todos los días entre las 18:00 y 23:30 horas. Tienen un aforo definido de 30 personas para el primero y 15 para el segundo y pueden ser utilizados en bloques de una hora para permitir la rotación de trabajadores. Su ingreso se define por orden de llegada.