En la reunión de junio se abordó la necesidad de conocer y entender a cabalidad las herramientas preventivas.

La seguridad en Minera Centinela es, ante todo, una responsabilidad humana. Así lo planteó el gerente de Seguridad y Salud Ocupacional (SSO), Jorge Yoma, en la Reunión Ampliada de Seguridad y Salud Ocupacional (RASSO) de junio, al invitar a líderes y equipos a “conectar emocionalmente con la prevención”, entendiendo que una cultura preventiva nace del compromiso profundo con volver sanos a casa y cuidar a los demás.

El llamado cobró especial fuerza tras un mes complejo en términos de accidentabilidad, con un accidente de alto potencial y otros tres con lesiones, lo que obligó a mirar con más atención no solo los indicadores, sino la efectividad real de las acciones preventivas. A pesar del buen desempeño en cumplimiento de actividades, los resultados reflejan que aún hay brechas que cerrar.

En ese contexto, la reunión abordó también el uso e integración efectiva de herramientas, como el ARTP, como elementos clave para anticiparse a los peligros. “No basta con aplicar la herramienta: necesitamos que los equipos la entiendan, la hagan suya y la utilicen para planificar con sentido”, fue parte del mensaje compartido por el ingeniero de Gestión de Riesgos de Seguridad, Hugo Órdenes.

Reconocimientos

Como cada mes, se reconocieron buenas prácticas que reflejan ese espíritu de prevención activa. El técnico Juan Vargas fue destacado por aplicar correctamente la herramienta “Yo digo no”, y el jefe de Turno, Anthony Castillo, por una innovadora medida que evita riesgos de incendio. Por primera vez, la Copa SSO fue entregada a una empresa colaboradora: Rocmin.